Cierra los ojos.
Contempla por un momento
que podrían ser tres o cuatro años
tómate tu tiempo.
Nuestras orejas rojo sangre al teléfono
Las palmas de las manos secas
Los dedos sabor a un último cigarro
Mira bien adentro
Los pulmones a punto del colapso
El pecho inflado de tiempo perdido.
Escucha bien atento.
Nadie puede brindarte el cielo
nadie puede llamarte por las noches
Suplicando que cubras con tu lengua
un cuello desnudo.
Entregarse en cuerpo y alma
Y yo, que sigo dedicando
mis desvelos a tu espalda
Que continuo simulando
una mano tuya sobre mis rodillas
Te buscaría en todos mis sueños
las nubes que me duermen
En todos los jardines
Las rosas amarillas
Y noches de verano en mi balcón
Los veintidós grados bajo el sol
Te daría el agua, la comida y el techo
Un abrigo hecho de lana
Y aún así
amor
No te daría nada.
Solo pido que mires
Bien adentro
Que es lo que quieres con cada célula de tu cuerpo
Que es eso que pasa por tu mente
Cuando tres acordes hacen melodía
Y un silbido te sopla en la nuca
Porque no me aparecía.
Que es lo que exclama tu piel arena
Si es que la percibes
Pero mira
Piénsame de nuevo
Mira dentro
Ahora
Solo pido que te mires
Bien adentro.
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