Sin permiso

Se presenta,no saluda
hacia el centro de mi ternura
La gravedad del beso que no cede
Recorriendo, pasos torpes y un alboroto embriagador
Sobre tu honda cabellera
cae un peso abrumador
aroma salvaje
permite al oleaje
Una esencia verdadera
Las violetas,los azules,la marea
desemboca en mis caderas
matutino llamado vertiente
oro, hierro
con la piel incandescente
verte marchar
no verte
Se diría
siempre nuestro equivalente
A beber del mal lo que es digno de ser amado!
lejos estás del paraíso prometido
evoco el placer furtivo
me rindo al condicionado
he de regresar como el secreto que me incita
he de caminar como la flor que resucita
Embeber,sembrar,cambiar de tierra
infantil encantadora
atender la mordedura
que castiga lo que dices
en las entrañas guardo ahora
unas cuantas cicatrices
pero que ojos!
que mirada
no se despiden
no se presentan
invaden
conquistan
despiertan
no tocan la puerta...

y no me importa
¿quien quiere permisos?

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